
El pasado mes de abril la universidad de Valencia llevó a cabo un estudio minucioso con 2000 personas de todas partes del mundo. Se les realizaron varias pruebas de inteligencia a los individuos con ropa holgada y después se les hicieron pruebas de similar dificultad con ropa ceñida.
Los resultados no dejan lugar a la duda, las pruebas realizadas con la ropa muy ceñida al cuerpo obtuvieron un 30% menos de coeficiente intelectual. La causa de esto, aseguran los investigadores, es que la ropa muy ceñida no permite llegar correctamente la sangre al cerebro y por lo tanto, éste no puede funcionar correctamente.
Ya podíamos intuir algo de este estudio al ver en televisión programas como “Hombres, mujeres y viceversa” donde parece evidente que la sangre no les llega bien al cerebro. A partir de ahora cuando veas a alguien con la ropa muy ceñida al cuerpo ten en cuenta que no es que sea gilipollas, simplemente tiene falta de riego cerebral.